Hoy me encuentro en esa etapa de la vida donde nadie me dijo que la traición podía hacerme daño, me escondía tras las paredes de mi casa que tampoco era mia si no del tiempo que me iba consumiendo esperando un amor que tampoco existía.
A
veces la gente la cree que puede ser feliz en un abrir y cerrar de ojos, que
todo llega tarde o temprano, que nadie puede hacerte sufrir más de lo que ya
has sufrido, mientras queda tan poco de la batería pretendo decir en estas
líneas lo que tiempo ha hecho conmigo en estos 32 años.
En
mi culpa arrogante carente de orgullo miro a mi alrededor lo que pudo ser y no
fue, recriminándome que tanto tiempo más un ser humano puede perder, mientras
se duerme, mientras se ama, mientras esperas de los demás lo que diste durante
un tiempo no determinado en tu vida.
Las
espadas que vienen en los comentarios de la gente que no te conoce, los hombres
que pasan por tu vida sin dejar una palabra para volver y de pronto te
recuerdan, de pronto no eres más que esas vidas que algunas vez se sentaron a
tu lado a contarte y no dejan más que ese mal recuerdo.
Los
seres humanos disfrutan ser más heridos que amados, no entiendo esa forma de
sobrevivir. 13/09/2013